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Raúl: La Democracia te extraña !!! Imprimir
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Miércoles, 31 de Marzo de 2010 08:28

Por el Diputado provincial Abel E. Buil

Hoy, nuestra Democracia se siente huérfana y desprotegida. Especialmente hoy, la Democra-cia argentina añora la figura de su padre que se fue de este mundo hace, exactamente, hace un año. Hace un año falleció serenamente mientras dormía el Dr. Raúl Alfonsín, padre de la democracia moderna argentina.

Vienen a mi memoria emocionados recuerdos de las horas en que soñábamos con una Patria pacificada, en democracia, pluralista y con justicia y equidad para todos sus habitantes. ¡Aquello pa-recía un sueño imposible! ¡Y el único hombre que podría llevarnos hasta ese edén se llamaba Raúl!

Alfonsín me inspiraba y nos inspiraba a miles de jóvenes que soñábamos con la Libertad, con el fin de la prepotencia y del autoritarismo. Yo, como esos miles de jóvenes, llegué a la política bajo el poderoso influjo del magnetismo irresistible de ese gordo campechano que venía de Chascomús y nos recitaba la Constitución Nacional. Me arrimé para acompañarlo en esa quijotesca tarea de consolidar un sistema donde todos tuviéramos la palabra, donde todos importáramos y todos participáramos; un sistema de convivencia pluralista y solidario, socialmente inclusivo, con vigencia plena de la ley, tolerante con la disidencia y, por sobre todo, en el que imperase la libertad y el respeto a la diversidad!

Aunque con algunas deudas aún, la democracia hoy se muestra consolidada y fortalecida y, afortunadamente, son muchos los argentinos dispuestos a defenderla! Miles de jóvenes nacidos, educados y formados en Democracia, sueñan y trabajan en todas las ciudades de nuestro país. Sin embargo, con todas las dificultades que suponía el primer gobierno de la transición de la dictadura a un gobierno popular, Raúl supo constituir la unión nacional, afianzar la justicia, consolidar la paz in-terior, y asegurar los beneficios de la libertad para todos los argentinos.

Supo también derogar la tramposa autoamnistìa que firmó Bignone para garantizar la impuni-dad y llevar adelante un juicio histórico en el que se condenó a los responsables de la mayor masacre interna vivida por los argentinos. Supo concretar la paz con la hermana República de Chile. Supo restaurar la vida democrática en las universidades y en los más diversos ámbitos de la vida nacional. Supo promover las leyes del divorcio vincular y de la patria potestad compartida. Supo llevar adelante un ambicioso Congreso Pedagógico para reformular la educación autoritaria en una educación crítica y democrática.

También quiso pero no pudo democratizar y desconcentrar los sindicatos. Quiso pero no pudo terminar con el mal más pernicioso de nuestro país: la concentración de cerca de quince millones de habitantes alrededor de la Ciudad de Buenos Aires y su centralismo económico, cultural y social. Dio el puntapié inicial del MERCOSUR para la integración de la región.

Sus esfuerzos pacificadores, cooperadores e  integradores entre las naciones fueron reconoci-dos otorgándosele el Premio Príncipe de Asturias a la Cooperación Internacional en el año 1985.

¡Nos queda su señera conducta como ejemplo a imitar y valor a alcanzar! ¡Nos quedan sus pa-ternales rabietas para añorarlo como padre que lo sentimos! Hoy, la democracia argentina necesita más que nunca su ejemplo de tolerancia y de pluralismo; su pasión por el diálogo y por el debate de ideas; su inalterable apego a las instituciones; y, por sobre todo, su ejemplo de honradez y desprecio a las fortunas materiales!
 

Raúl: La Democracia te extraña !!!