Ud. está aqui:   Inicio Noticias Provinciales

Buscá en el Archivo de MasterNews

Bianco sobre negro Imprimir
Usar puntuación: / 0
MaloBueno 
Miércoles, 22 de Enero de 2020 13:06
El jefe de Gabinete aclara todas las dudas sobre el arranque del Gobierno, marca las prioridades y dice que descubrieron una deuda con proveedores de $70.000 millones. Afirma que “si no dejamos una Provincia mejor, nuestra gestión habrá sido un fracaso”
 
Su despacho es un desfile de intendentes y dirigentes políticos, y sobre sus espaldas recae la coordinación de un gabinete que todavía está en etapa de formación. Las banderas argentina y bonaerense, una foto de su exjefe Héctor Timerman y el mapa que coloreó con distintos fibrones de tono verde a medida que Axel Kicillof completaba la recorrida por los distritos de la Provincia son la milimalista decoración de la oficina donde Carlos “Carli” Bianco recibe a La Tecla. La charla es abierta, transita todos los temas de interés público y se extiende a cuestiones más personales.
 
-¿Les costó arrancar? ¿Por qué siguen sin llenarse casilleros importantes en la estructura del Gobierno?
 
-No sé si estoy de acuerdo con la primera parte, eso de que nos costó. Nosotros empezamos a ocupar de arriba hacia abajo, primero los ministerios y subsecretarías. Efectivamente, quedan algunos lugares sin designar, pero es normal en cualquier cambio de gestión cuando hay una estructura burocrática tan grande. Quedan algunos cargos y estamos analizando muy bien los perfiles, porque el Gobernador nos dio una instrucción muy clara de que el objetivo, pura y exclusivamente, es hacer una buena gestión; y eso se hace con gente que comparta la misma visión y objetivos que nosotros y que, además, esté capacitada técnicamente. Algunas cosas están sujetas a negociación con parte de la fuerza política, que es lo que estamos haciendo.
 
-¿Cuándo van a nombrarse los responsables de las empresas como Absa, Aubasa y Centrales de la Costa?
 
-Esa es una de las cuestiones que se están discutiendo con nuestras fuerzas políticas y estamos viendo los mejores perfiles posibles, tanto desde el punto de vista político como técnico. Queremos que las empresas del Estado provincial estén bien gestionadas y generen los mejores resultados, tanto financieros como en materia de los servicios que ofrecen.
 
-Desde la política aparecen algunas quejas de que por ahí se cerraron en el axelismo y no dieron lugar a otros espacios del Frente de Todos.
 
-Es cierto que hay una parte de los ministerios que está cubierta con aquellos que venimos trabajando desde hace mucho tiempo con Axel, que tenemos alguna confianza y alguna experiencia en materia de gestión en distintos ámbitos, y hay otros lugares donde se sumaron compañeros que no son estrictamente de nuestra construcción histórica, del equipo político-técnico de Axel. Pero también, cuando mirás un poquito para atrás, ni en el gobierno de Solá ni en el de Scioli hubo demasiados intendentes que fueron ministros. Para el resto de los otros cargos hay gente de muchos sectores. Estamos en muy buen diálogo con los intendentes, inclusive con los de los otros espacios políticos. No creo que Axel se haya cerrado a la hora de definir el gobierno.
 
-Hubo reuniones en la Casa Rosada con intendentes que abrieron especulaciones de que Alberto Fernández empezaba a hablar con los ellos dejando de lado al Gobernador. ¿Cómo lo ven ustedes?
 
-No, porque en esas reuniones había gente de nuestro gobierno y se organizaron de manera conjunta. La que hizo un poco de ruido en la prensa es la de Santiago Cafiero con intendentes para coordinar la aplicación del programa Precios Cuidados, pero en esa reunión es-tuvo el ministro de Producción de la Provincia, Augusto Costa. En el peor de los casos son malinterpretaciones, probablemente interesadas, de algunos sectores. Axel tiene diálogo permanente con Alberto y estamos coordinando todas las actividades. No veo un problema, ni el Gobierno nacional está intentando puentear a la Provincia. La relación está ordenada, como corresponde.
 
-En una nota con Clarín dijo que con asistencialismo no se sale adelante. ¿Cuáles son los programas para sacar a la Provincia adelante cando el asistencialismo también tiene que estar?
 
-Sí, tiene que estar. Lo que digo es que en el largo plazo no es una receta, sino una cosa transitoria de corto o mediano plazo. Si durante 10 años necesitás brindar asistencia a la población porque no le pudiste generar empleo, o posibilidades de vida autosustentable, es porque hiciste mal las cosas. Cuando asumió Néstor Kirchner, en 2003, había cerca de dos millones y medio de planes sociales, que estaban bien porque era un momento muy complicado; 2015 terminó con 200.000. Es decir que el problema de mediano plazo se había solucionado en gran parte, y la FAO de Naciones Unidas había declarado a Argentina país libre de hambre. Está bien que hoy pongamos uno de los ejes en la lucha contra el hambre y la pobreza más extrema, pero si dentro de cuatro años estamos diciendo lo mismo es porque no le dimos a la tecla.
 
-¿Entonces?
 
-Tenemos que tenerlo medianamente solucionado, sabiendo que, además, estas cuestiones dependen mucho de lo que pasa en el mundo y en la región; de la macroeconomía nacional, que nosotros no manejamos, y que está siendo correctamente manejada. Pero al mismo tiempo sabemos que no es una situación del contexto internacional que nos va a hacer crecer aceleradamente como entre 2003 y 2007. Esto no es una excusa, es la pura y dura realidad.
 
-En la primera entrevista con La Tecla, en octubre, dijo: “No vamos a usar de excusa el estado calamitoso en el que sabemos vamos a recibir la Provincia”. Sin embargo hay una recurrencia en repetir lo de tierra arrasada. ¿Por qué?
 
-En términos generales sabíamos con qué nos íbamos a encontrar, probablemente no teníamos los números finos, pero sí teníamos indicadores múltiples de la situación. El principal indicador eran las permanentes recorridas que hacíamos por la Provincia. Además, todos los datos públicos que había estaban muy mal. Ya lo decíamos en la campaña que era tierra arrasada, y si no hubiese sido así, no hubiesen tenido un resultado (electoral) tan adverso.
 
-¿Su cuadernito de anotaciones se llenó más cuando llegaron?
 
-Esos dos cuadernitos (señala el escritorio y pide que le acerquen uno) son los de la campaña, y ahora tengo que comprar otro, porque se me terminaron. Tengo anotados todos los problemas que íbamos encontrando; tengo una tesis de doctorado ahí. Por ejemplo: Carmen de Areco, cooperativa eléctrica, altas tarifas, no se puede pagar la energía, la tarifa social no alcanza, aumento del 2.300 por ciento. Lo abro y te digo distrito por distrito lo que pasa.
 
-¿Qué debe quedar al final del gobierno de Kicillof?
 
-Una Provincia mejor que la que encontramos. Y si no dejamos una Provincia mejor, nuestra gestión habrá sido un fracaso.
 
-¿Cuál es la ventaja y la desventaja de trabajar con un amigo?
 
-Siempre es más fácil. Igual, yo no soy un amigo de la infancia, ni de la secundaria, ni de la universidad. Antes que un amigo, Axel es un referente y un compañero. No sé si soy amigo, soy un compañero. Sí tenemos mucha confianza, que gran parte se generó en la campaña, de los tantos kilómetros y tantas horas compartidos, con charlas que en lo general eran histórico-políticas, pero también uno cuenta cosas de su vida. Es muy fácil laburar con Axel, porque tiene las ideas muy claras; se sabe lo que espera de uno, es muy afable, siempre está de buen humor, nunca te va a reprender ni gritar. Es muy llevadero y placentero el laburo cotidiano con Axel.
 
-¿En qué se asemeja y diferencia de su par en el Gobierno nacional, Santiago Cafiero?
 
-Es un compañero. Lo conozco porque cursamos juntos algunas materias del doctorado de Desarrollo Económico de la Universidad de Quilmes. Es un gran compañero.
 
-¿Se considera un tipo informalmente rebelde?
-No sé, no sé bien a qué refiere eso. Si es por la ropa, acá uso bastante traje; y muchas veces usé corbata cuando estaba en cancillería, por una cuestión más formal. Si puedo, no las uso, me resultan incómodas. Y rebelde, no sé; podría ser peronista rebelde, el peronismo es rebelde por definición.
 
“No tenemos pensado hacer una caza de brujas como hizo el macrismo”
 
-Hay quienes se quejan porque permanecen funcionarios de la gestión anterior.
 
-Entiendo que pueden haber quedado algunos directores de línea, pero no hay ningún subsecretario, ni ningún ministro; una excepción es el de Aprevide, pero ya explicó Berni cuáles son las razones por las que sigue. Tampoco nosotros vinimos a descabezar toda la línea burocrática de los ministerios. Muchos directores de línea son gente que, si bien participó del gobierno anterior, es de planta y hace 15 o 20 años que está en la Provincia. En la medida que cumplan sus obligaciones laborales, nosotros no tenemos pensado hacer una caza de brujas, como hizo el macrismo en Nación y, en parte, en Provincia. Sobre todo en Nación, donde te miraban el Facebook; nosotros no le miramos el Facebook a nadie. Queremos gestionar la Provincia con los mejores funcionarios posibles. Además hay tareas que requieren cierta continuidad burocrática; no es que llegás un día y echás a todo el mundo, porque eso paralizaría a la Provincia. Me gusta decir esta frase del Flaco Menotti: “No hay que confundir vértigo con velocidad”. Una cosa es ir rápido y otra es tener vértigo.
 
-¿Sienten que les tienen menos paciencia que a gobiernos anteriores, en la calle, en los medios?
 
-No veo ningún problema en la calle, no nos marcó la cancha ni nos quitó el apoyo. Por parte de los medios, no creo que sea una cuestión de paciencia, sino que creo, que por un lado, Axel ha generado mucha expectativa por su candidatura, su formato de campaña y las ilusiones que ha generado en la gente; y por otro lado hay una cuestión bastante obvia, y es que durante los cuatro años de Vidal no sé si habrá venido algún móvil de televisión de Capital a La Plata; y si vinieron fue en contadas ocasiones y por temas puntuales. Ahora, a cinco días de haber asumido Axel, vivían acá, en la puerta. No tengo una explicación racional para eso.
 
El mate compañero de todas las horas
 
-¿Cuántos termos de mate por día toma?
 
-Ese es un punto. Yo tomaba mate de chiquito con mi abuelo, que era uruguayo pero se había criado en Gualeguaychú, y, obviamente, se levantaba a las seis de la mañana y eran las doce de la noche y estaba tomando mate; como yo pasaba mucho tiempo con él, tomaba mate. Cuando falleció, como en mi casa ni mi vieja, ni mi viejo, ni mi hermano tomaban, dejé por más de veinte años; y volví a tomar mate en la campaña, en el Clio, con Axel, porque él toma todo el día. Y mi compañera es de Gualeguaychú, arranca con el mate a las seis de la mañana y es la medianoche y sigue, mientras yo bebo una copita de vino. Pero ahora tomo mate todo el tiempo.
 
La reforma política no es una prioridad
 
-¿Piensan llevar adelante alguna reforma política?
 
-Estamos más preocupados por las urgencias económicas y sociales.
 
-¿Se puede rediscutir la ley que limita las elecciones de los intendentes?
 
-No hay reclamos sobre eso. No está en discusión.
 
-¿La Constitución de la Provincia debería ser modificada?
 
-No lo veo como una necesidad de corto plazo.
 
“No me voy a quedar a cargo de la gestión directa de Lotería”
 
-¿Usted va a seguir manejando Lotería?
 
-No. En unos días se estará definiendo una presidencia y una vicepresidencia. Por ahora, como está dentro de la estructura general de la Jefatura de Gabinete, hay gente que está llevando a cabo la gestión. No voy a quedar a cargo de la gestión directa de Lotería.
 
-¿Tiene que ver esto con que varios de los tenedores de deuda de la Provincia están vinculados a la industria del juego? Porque es algo de lo que también se habla.
 
-No, para nada. Ni siquiera lo sabía.
 
“Con los proveedores identificamos una deuda de $70.000 millones”
 
-El ministro Gollán mostró la deuda con los proveedores de Salud. ¿Saben ya cuál es el número de lo que se les debe a los proveedores de todos los ministerios?
 
-Lo que descubrimos son aproximadamente setenta mil millones de pesos. Digo descubrimos porque todos los días hay una explosión nueva en algún lado y tenemos que revisar la deuda, etcétera; pero lo que hemos identificado son, aproximadamente, 70.000 millones de pesos.
 
-¿Cómo piensan afrontarlo?
 
-En algunos casos estamos realizando pagos parciales, en otros casos estamos revisando si están cumplidos los certificados de obra, si la deuda está documentada.
 
-¿Está la posibilidad de sacar un bono?
 
-Hoy, no lo hemos estudiado. Estamos avanzando con los pagos en la medida en que los recursos propios nos lo permiten y el goteo que está realizando la prórroga del Presupuesto nacional. Es una realidad que estamos afrontando con seriedad, y sabemos de las demoras, que son de hasta cuatro o cinco meses, incluso más en algunos casos.
 
“Con esta deuda es imposible atender los problemas estructurales”
 
“Sabemos que la Provincia tiene problemas estructurales, que se profundizaron mucho desde el año 76 para acá. Y no se solucionan de un día para el otro. Pero los queremos resolver, sabiendo que debe hacerse en el mediano y largo plazo, y sabiendo que el escenario internacional es complejo y que no hay re-cursos de sobra para atender esos problemas estructurales. No obstante, los recursos que haya los vamos a direccionar primero a la solución de los problemas coyunturales y después a los estructurales”, aseguró Bianco en la entrevista con La Tecla.
 
Para el ministro, “la Provincia va a solucionar los problemas en tanto y en cuanto pueda desarrollarse productivamente”, y esa es una de las razones por las que se pide la reestructuración de la deuda. “Si solamente nos limitamos a rascar la olla para pagar los vencimientos de capital e intereses tal como están hoy, no vamos a solucionar ningún problema estructural. Para eso, primero tenemos que hacer la deuda sustentable en el tiempo y con los recursos sobrantes ir atacando de a poco los problemas estructurales”, explicó.
 
“Con el nivel de deuda y de vencimientos que nos dejaron es imposible atender los problemas estructurales”, sentenció el jefe de Gabinete, y reflexionó: “No es que un día nos levantamos y dijimos ‘¿Y si postergamos los vencimientos de capital?’ No. Esto está pensado, planificado, estudiado, hablado con el Gobierno nacional; está avisado a los tenedores de deuda desde hace muchos meses”
 
Insistió Bianco en que los acreedores “sabían que íbamos a plantear esto, y sabían que si ganaban Macri y Vidal, lo iban a tener que hacer igual. Quienes mejor sabían que las deudas de la Nación y la Provincia eran insostenibles en el tiempo eran los tenedores. Por eso, los mercados, como les gusta llamarlos a ellos, ya ofrecían una quita del 20 por ciento”.
 
“La cláusula gatillo es un invento del macrismo y una cuchilla de doble filo”
 

-¿Cómo anticipa la discusión por las paritarias?

-Las paritarias son representaciones legítimas de los trabajadores y trabajadoras que, efectivamente, en algunos casos han sido más golpeados que otros. Pero es un reclamo legítimo que tenemos que escuchar y trabajar en el contexto de escasez. Lo que veo, por las primeras conversaciones con los representantes sindicales, es que, por lo menos, tienen una tranquilidad de que este gobierno no es su enemigo, a diferencia del anterior, que los había perseguido, denunciado, amenazado.
 
-El Presidente dijo que se debía desindexar la economía. ¿Eso obtura la posibilidad de la cláusula gatillo?
 
-La cláusula gatillo fue un invento del macrismo en el 2017 y una cuchilla de doble filo. Lo hicieron después de un año donde habían recortado severamente lo salarios reales, porque las paritarias de 2016 fueron muy por debajo de la inflación, y en el 2017, que era año electoral, quisieron asegurarse que no haya una nueva caída del poder adquisitivo del salario. Ahora, la cláusula gatillo también asegura que el aumento salarial no va a estar por encima de la inflación, es decir, que los trabajadores no van a tener ninguna me-jora en términos reales de sus salarios. En algunos casos, la volvieron a instaurar el año pasado. Nosotros, en la situación financiera en la que nos encontramos, lo que queremos asegurar es un camino de sustentabilidad en los ingresos y re-cursos de la Provincia y, en la medida de lo posible, mejorar las condiciones salariales de los trabajadores. Y nos parece muy acertado lo que está haciendo el Gobierno nacional de desindexar la economía en los distintos ámbitos.
 
“La prioridad no es seguir endeudando a la Provincia, sino desendeudarla”
 
-¿Cuál es la estrategia para salir de esta situación de “tierra arrasada”, como la califican ustedes?
 
-El Gobernador ha fijado en la campaña sus prioridades, y ahora son nuestras prioridades de gestión: producción, empleo, salud y educación; y la cuestión más urgente, que es el hambre, que la estamos trabajando con el Gobierno nacional a través de la tarjeta Alimentar. En Salud se salió a mejorar la vacunación del sarampión; salió toda la gente del ministerio en coordinación con los municipios a hacer actividades de descacharreo y concientización por las enfermedades estivales; estamos avanzando en la recuperación de la producción pública de vacunas y se asiste a los hospitales que están en peores condiciones. En materia de Educación se va a lanzar un plan para la mejora edilicia de las escuelas. En Producción y Empleo, la ley Impositiva ya tenía varias medidas que son tendientes a las mejoras de las condiciones; se está lanzando una moratoria impositiva; y se trabaja con el Banco Provincia para lanzar líneas de crédito productivo. Aunque la realidad financiera que tenemos hoy es una restricción.
 
-¿De dónde va a sacar los recursos, por ejemplo, para mejorar la infraestructura escolar cuando más del 90 por ciento del presupuesto en salud se lo llevan los salarios?
 
-Alguna cuestión por reasignación de partidas, alguna otra con el trabajo de cooperativas a través del Gobierno nacional, incluso hasta donaciones de empresas de pintura. Estamos trabajando todo lo que se puede y todo lo que se nos ocurre en ese contexto de escasez de recursos. Lo vamos a ir llevando adelante de a poco en la medida que los recursos financieros y materiales lo permitan. Se han cambiado claramente las prioridades; nuestra prioridad no es seguir endeudando a la Provincia, sino desendeudarla para no tener que pagar tantos intereses y vencimientos de capital, para que en el mediano plazo tengamos muchos más recursos para del desarrollo productivo, de la educación y de la salud. Si no tuviéramos este vencimiento de deuda de capital de 250 millones de dólares estaríamos mucho más holgados, incluso para atender necesidades salariales.
 
“Con los intendentes de Juntos por el Cambio estamos trabajando muy bien”
 
-Hay intendentes de la oposición que piden ayuda financiera. ¿Qué respuesta van a recibir después de haber empujado para realizar modificaciones en la ley Impositiva?
-Estamos ayudando tanto a intendentes de nuestra fuerza política como de la oposición, en la medida de lo posible y en la medida de lo razonable. Además, la mayoría de los intendentes de Juntos por el Cambio salieron a declarar que el Gobernador necesitaba la ley Impositiva. Dijeron que había que votarla porque todos estamos en problemas.
En la reunión que tuvimos con el Foro de Intendentes de Juntos por el Cambio nos sorprendimos muchísimo, porque una vez que Axel hizo su exposición de la situación en que encontró la Provincia pidió que si lo que decía era mentira, alguien se lo dijera, y nadie lo contradijo. Nadie dijo “la Provincia no está en tierra arrasada”.
 
-¿Y qué dijeron?
 
-Cuando tomaron la palabra le dijeron: “Gobernador, nosotros tenemos los mismos problemas en nuestros distritos que los que usted dice que tiene en la Provincia, y necesitamos de la ayuda”. Los problemas son comunes y las soluciones deben ser consensuadas entre todos. Con los intendentes de Juntos por el Cambio estamos trabajando muy bien.
 
“En los próximos meses va a haber un realineamiento de la oposición”
 
-Después de lo que pasó con la ley Impositiva, ¿cómo vislumbra la discusión del Presupuesto?
 
-Creo que en los próximos meses va a haber un realineamiento de la oposición. Espero que se definan interlocutores más claros para esa negociación. La de la Impositiva fue muy desordenada porque aparecían interlocutores variopintos, y cuando se le hacía una propuesta a uno, otro la desconocía. Lo bueno es que terminó definiendo la discusión política, porque quedó bien delimitado qué intereses defendíamos nosotros, que son los de la mayoría de los bonaerenses, y qué intereses defendían ellos, como los de los sectores más concentrados, como los operadores de cable. Y esto no es una queja, porque eso es sano para la democracia. Me parece muy positiva la discusión.
 
-Si terminaron conformes, ¿por qué el Gobernador se mostró enojado con la situación? ¿Hicieron autocrítica de cómo manejaron mediáticamente la situación?
 
-No, no tenemos ninguna autocrítica para hacer. Quedamos muy conformes con el proceso y con el resultado. La ley, si bien tuvo algunas modificaciones menores, se votó con el noventa y pico por ciento del contenido que habíamos presentado nosotros; se mantuvo el espíritu progresivo, el espíritu de actualización respecto a la inflación. Lo que sí sucedió es que, por las modificaciones que se implementaron en la Cámara de Senadores, hemos perdido espacio fiscal. Y si pareció que el Gobernador estaba enojado era porque lamenta no tener esos recursos para solucionar los problemas de los y las bonaerenses. Si hubo un enojo, fue ese.
 Bianco sobre negro