El gobernador bonaerense Axel Kicillof se mostró preocupado tras el hallazgo de un cadáver en un canal cerca del límite entre los partidos de Villarino y Bahía Blanca, en la zona en la que hace más de 100 días desapareció Facundo Astudillo Castro.
Cauto, Kicillof aguarda que la Justicia esclarezca el caso para tomar medidas, pero advirtió: “No vamos a encubrir a nadie y vamos a colaborar con la investigación”.
“Desde un primer momento, estamos muy preocupados por el caso. El ministerio de Seguridad de la Nación está enviando un grupo de antropología forense para estudiar el cuerpo que se encontró”, apuntó Kicillof, en diálogo con CNN Radio.
La noticia trascendió alrededor de las 23 y fue confirmada a LA NACION por fuentes del Ministerio de Seguridad de la provincia de Buenos Aires antes de la medianoche. “La familia pidió que se investigara con la justicia federal y Policía Federal. Estamos colaborando con todo lo que requiera la Justicia y la familia. Siempre me puse a disposición para que se encuentre la verdad”, sostuvo Kicillof. Y resaltó: “Estamos esperando que la Justicia resuelva, que se sepa qué pasó, y voy a actuar en consecuencia”.
El cuerpo encontrado en el agua no pudo ser reconocido a simple vista. La identificación de los restos será realizada por el Equipo de Antropología Forense, algunos de cuyos integrantes se habían sumado en los últimos días a las fuerzas federales encargadas de la investigación del caso y de la búsqueda propiamente dicha de Astudillo. El joven de 22 años fue visto por última vez en un control de la policía bonaerense cuando se dirigía a visitar a su exnovia a Bahía Blanca desde la localidad de Pedro Luro. El caso es motivo de una fuerte preocupación en los gobiernos nacional y provincial por la supuesta participación de policías.