Escribe Jorge Pablo Rosolen
Luego de creado el Partido los conflictos no terminaron ya que el Gobernador designó como Comisionado local, una suerte de intendente al Diputado Genserico Ramirez, el pueblo de Rivadavia se opuso a esa designación ya que Ramirez se había opuesto a la creación del Partido y logró su cometido, cambiando la idea del Gobernador que designo comisionado al Diputado Kennedy quien había apoyado la creación de Rivadavia y que terminó siendo el primer comisionado local.
Para lograr que no se designara a Ramirez, los locales hicieron una gran marcha que Ángel Garzo inmortalizó en una pintura que se encuentra en la entrada del Honorable Concejo Deliberante.
En este fragmento también se nombra a algunos de los vecinos que llevaron adelante aquella maravillosa gesta. Que no caigan en el olvido.
Subo aquí, la crónica de esa marcha que un cronista local desconocido (Pudo haber sido Groppo dueño del Periodico “El Demócrata”, pudo haber sido Falcon, director del periodico.
Esta crónica la escribieron años despues, en el año 1926.
Subo una de las fotos original de esa marcha y la pintura de Angelito basada en otra de las fotos.
Que lo disfruten.
¡Felices 115 años partido de Rivadavia !

EL DEMÓCRATA- Fragmento del 26 de setiembre de 1926
“Los miembros de la Comisión que han actuado en todas estas andanzas han de recordar una porción de hechos mas o menos jocosos, mas o menos serios en los que les han tocado intervenir.
El señor Cándido Suarez quien deliraba con la autonomía antes y después de consumada, en sus continuos viajes a Buenos Aires y La Plata y en conferencias con el Dr. Jofré……., Don Manuel Bidart, siempre hermético e impenetrable, que anduvo escaleras arriba y escaleras abajo de hotel en hotel con una damajuana de agua durante 5 días con el objeto de analizarla, y en conferencia con Don Santiago Chorra, Don Urbano Vicondo que paraba en el hotel Español, con sus estribillos “Sean eternos los laureles” “Ma que quieres que te diga” “Acá son todos mancos pero el poncho no aparece” y también de conferencias con Don Santiago Chorra, Don Antonio Azcona y Don Leopoldo del Campo; Don Ruperto Fernández quien tuvo un importante papel en esta emergencia pues fue el que mas influyó en el espíritu del señor Gobernador para que anularan el nombramiento del Sr. Genserico Ramírez como comisionado de Rivadavia, Don Godofredo Hess y Don Federico Grobly quienes en su calidad de terratenientes y hombres progresistas tenían sumo interés en la autonomía; Don Pedro Aguirre –socio de Don Urbano- aunque menos andariego festejaba y celebraba los triunfos como que le eran propios; Don Manuel González que antes de su enfermedad, gastaba buen humor y era hombre de sano consejo y buen criterio; Don Juan M. Charpín, Presidente de la comisión Pro-autonomía, quien con su tranquilidad habitual y buen humor mantenía tenidas de horas y horas de buena charla; el Dr. Ambrosio Lugones quien con su verba cálida, su entusiasmo y su gran corazón era el paladín de todas las buenas causas. Don Marcos S. Ghiglione que quieras o no le ha tocado bailar en todas; el Dr. Juan E. Gemesio sereno y reposado y esencialmente progresista fue uno de los ases de la autonomía y el señor Elías J. Olivares nervioso y activo fue también en el asunto un elemento de primer orden.
Todos, en este momento traen a nuestra memoria hondos y grandes recuerdos de aquella época, en que algunos de nuestros mejores amigos han desaparecido.
Los nombres de los hermanos Jacinto y Javier Igoa, don Bernardo Busso y su hijo José, don Roberto Lowe, don Julio Roussey, don Marcelino Cabrera, don Felipe Álvarez, don Jacinto Casillas, Juan José Carreras, Juan Galdeano, Agustín Cienfuegos, Dámaso Rodriguez, Julio Panadero, Jorge Nicolás, Bautista Funassi, Antonio Miri, Natalio D´Mattia, Patricio Coyne, Francisco Lobon, Pedro Olaverría, Juan B. Azcarate, Martín Arbelbide, Tiburcio Bilbao, Aurelio Borla, Juan Mendía, José Landetta, Víctor Barrera, Domingo Ciceri, Duilio Bonzi, Luis Polo, Eugenio Porcel, Pedro Sansebastián, Andrés Aguirre, Dubary, Salvi, Eduardo Grondona, Fernández Gárgolas, Francisco Santiago, Sebastián Sarobe, Enrique Marenzi y Hnos, Juan Panizza y hno, Plácido Martínez, Amadeo Domínguez, Santiago Scarella, Plácido Novo, Juan Santa Cruz, Alfredo Caballero, Antonio Belloni, José Rosotti, José Pardo, Mauricio Porro, Antonio Pagano, etc, etc, y tantos que sentimos no recordar que han estado siempre con la buena causa y que figuran en todas las manifestaciones, lo mismo que al frente del meeting contra Ramírez.
Por fin después de tres años, el 29 de setiembre de 1910 y bajo el gobierno de Don José Inocencio Arias, el pueblo de América obtuvo su autonomía, triunfando de sus dos adversarios, y meses después al par que en el Senado se cambiaba el nombre de América por Rivadavia, el señor Gobernador hacía su primer nombramiento: el de Comisionado Municipal de Rivadavia, recayendo dicho nombramiento en la persona de Don Gensérico Ramírez…
Comprenderán que tal nombramiento cayó como una bomba! Cómo? Después que este Caballero fue nuestro enemigo en la Cámara, el que le disputó al Dr. Jofre el triunfo sin conseguirlo por supuesto; el que había hecho lo imposible para que América no se emancipara, resultaba ahora Comisionado? No podía ser!… y a esto se agregaba, como una burla sangrienta, que los empleados intrigantes estaban alborozados con la noticia, pues era a ellos precisamente a quien favorecía tal nombramiento…
Grandes revuelos en el Pueblo, reuniones, conferencias, telegramas, viajes a Buenos Aires y La Plata en comisión encabezadas por el Dr. Lugones, para pedir a los diarios que nos acompañaran con artículos adecuados con el objeto de obtener que el Gobernador retirara su candidato y en vista que no había manera de impedirlo. Reunido el Pueblo ya de Rivadavia en magna asamblea resolvió realizar uno o dos grandes meeting de protesta contra el comisionado y como puede verse en las fotografías, ese meeting se realizó llevando a guisa de estandarte un gran letrero, en el que se leía a grandes letras la leyenda siguiente: “Meeting de protesta contra la candidatura de Don Genserico Ramírez, el que fue paseado por todas las calles de Rivadavia.
La manifestación que fue grandiosa, llena de entusiasmo y al son de bandas de músicas recorrió el pueblo para disolverse en la Plaza Colón después de los discursos de práctica.”
Master News El Primer Diario Digital de Rivadavia