Este sábado vecinos del barrio Perón de América contaron en redes sociales la trágica muerte de un animal que fue atropellado por una camioneta que ni siquiera paró pero más triste fue lo que sucedió después…
La perrita de nombre Canela era como muchos animales de la ciudad, de esos que andan en la calle habitualmente porque sus dueños no se encargan de ellos y los dejan a la buena de Dios pero no por eso tenía que morir
Este sábado una camioneta blanca que pasó a toda velocidad por la calle Perón la impactó produciéndole heridas que la llevaron a la muerte, el conductor se dio a la fuga sin siquiera detenerse a ver lo que su andar desaprensivo había causado.
Pero lo más triste vino después… la perrita como pudo se arrastró con las últimas fuerzas hasta la puerta de la casa de su dueño quizás buscando ayuda y cuando vecinas le avisaron lo sucedido solo encontraron como respuesta “que se joda por andar en la calle”. Las vecinas se contactaron con las chicas de Animales en Movimiento y cuando estas llegaron con un veterinaria el animal había muerto.
Si algo le faltaba a esta triste historia es que el dueño de Canela no quiso enterrarla “Tírenla por ahí” dijo ante las miradas atónitas de quienes intentaron ayudar a la perrita.
Sin dudas esta historia muestra en toda su magnitud cuan despreciable puede ser una persona con un animal que si se tiene en un domicilio debe ser tratado como un integrante más de la familia.
Ahora Canela descansa en paz gracias a las vecinas y la gente de Animales en Movimiento que intentaron ayudarla, a Juan y Fermín que cavaron el pozo para enterrarla cosas que su “dueño” tendría que haber hecho y no hizo…