Este sábado 15 de enero murió a los 86 años de edad Elizabeth Amanda Marchelli de Milani, la mujer que marco con su impronta un antes y un después en la función pública, en lo institucional y en la comunidad.
Por Ricardo Novo*
A Petete se la podría describir de mil formas y seguramente no alcanzaríamos a tomar real dimensión de lo que ha significado para nuestro distrito y para la región. Nunca una mujer ha sido tan importante, al mismo tiempo, para la vida política, un municipio y para las instituciones intermedias que componen una localidad.
El decir que marcó un antes y un después en nuestra historía nos es caprichoso sino real sabiendo que a partir de sus acciones y trabajo ya abría camino a las mujeres antes de que existiera la igualdad de género.
Hoy el municipio y las principales instituciones de la ciudad tienen en su historia grabado a fuego su nombre. Fue Secretaria de Gobierno y Sec. Técnica del Intendente Alfredo Díaz entre 1973 y 1976. La primer mujer en ejercer el cargo de Presidente del Concejo Deliberante entre los años 1985 a 1987 y siguió siendo concejal hasta 1993.
Fue de gran ayuda a los gobiernos del Intendente Héctor Luis Trucco de 1987 a 1991 y luego de ser derrotada en 1995 a manos del propio Trucco en las elecciones municipales donde fue la candidata del APRI y siguió colaborando en el municipio.
Como si esto no alcanzará durante años trabajó ad-honorum en las gestiónes que tuvo el Intendente Sergio Buil, atendiendo temas básicos de la Secretaría General del Municipio, en especial trámites jubilatorios de empleados municipales, y siendo Delegada del I.P.S de la Provincia de Buenos Aires.
Con respecto a las entidades intermedias, integró distintas asociaciones civiles que la tuvieron como miembro en las comisiones directivas, ya sea como Vocal, Secretaria, Sindica, Asesora, incluso Presidente o Vicepresidente; LIPOLCC, (Liga Popular de Lucha Contra el Cáncer); Asociación de Bomberos Voluntarios de Rivadavia (representando a varios Distritos del oeste bonaerense en la Federación de la Provincia de Buenos Aires); Centro de Jubilados de Rivadavia; Cooperativa de Electricidad de Rivadavia (a cargo de la Secretaría del Consejo de Administración); Foro de Seguridad y Centro de Formación de Emprendedores de Rivadavia, Cooperadoras Escolares y además siendo un pilar importantísimo en su querido Instituto América.
Petete dejó un legado muy importante que hoy se traduce en la inmensa familia que formó junto a su querido Beto Milani, sus hijos Fabiana, Carlos y Piru, sus nietos y bisnietos siguen su camino en esto de ser buenas personas, de estar siempre para ayudar al projimo, de participar en la comunidad y de decir presente siempre que se los necesita.
Para graficar el significado que Petete le daba a la vida basta con conocer la historia de aquel niño que allá por la década del 70 iba a la vivienda de los Milani todos los días a mirar televisión porque en su casa no había. Le daban de comer, lo hacían sentir como un integrante más de la familia, lo ayudaba a él y su familia no solo en lo material sino también formándolo con palabras y consejos. Aquel niño es hoy este comunicador social que mientras escribe estas líneas deja correr una lágrima al recordar esos momentos.
Alguna vez afirmé sin miedo a equivocarme que Elizabeth Amanda Marchelli fue la mujer más importante de la historia rivadaviense y hoy vuelvo a remarcarlo ya sin ninguna duda al ver lo que ha significado su paso por nuestras vidas e instituciones.
Hasta siempre Petete, estarás siempre en nuestros corazones.
*Director Grupo Master
Foto de portada: Adriana Beiersdorf