Se trata de un robo de hacienda con pocos precedentes, no por la modalidad, si por la cantidad sustraída y se produjo en un campo de la zona rural de esta localidad pampeana, propiedad de un tandilense de apellido Duca.
El predio es conocido como Don Francisco y el titular del mismo es alguien que está radicado en Tandil y hacía varios meses que no podía viajar al campo, producto de los impedimentos o concejos impuestos en pandemia.
Lo cierto es que al poder hacerlo se encontró con la terrible noticia de que había un gran faltante de hacienda, de un predio que normalmente tiene más de un millar de cabezas.
En principio trascendió que el número era de 324 animales, la gran mayoría integrantes de un feedlot que tiene dicho campo. Pero en las últimas horas, al hacer un recuento total del ganado, se encontraron que el número ascendía a más de medio millar, concretamente se está hablando de 566 animales.
Este crecimiento de la cantidad de hacienda robada es que, inicialmente, no se había hecho el recuento en los cuadros donde había vacas preñadas, donde pudieron comprobar que faltan más de doscientas.
Con sólo pensar lo que vale el kilo de carne en cualquier carnicería de nuestra provincia, no es necesario ser experto en los precios del ganado en pie para darse cuenta que el daño económico generado es millonario. El cálculo estimado, a valores actuales, es de más de 25 millones de pesos.
La investigación policial está encaminada a saber cómo se produjo este ilícito y el destino que tuvo la hacienda faltante. Porque insistimos, en este predio rural habitualmente hay algo más de un millar de animales, y algún faltante puede pasar desapercibido, pero no la mitad de la totalidad de las cabezas.
Si la hipótesis se orienta a que utilizaron camiones para sacar la hacienda que ya no está en el campo, se estima que se necesitan más de una decena para trasladar semejante cantidad. También cabe que hayan sido retiradas arriando, pero las fuentes policiales consultadas por este medio insisten que, entre los vecinos del campo, que podrían haber sido testigos de movimiento que imprimió semejante robo, no han notado nada extraño.
Cabe que este robo se pudo haber hecho tipo “hormiga” ya que contaron varios meses para concretarlo (marzo a noviembre), pero el campo tiene personal que administra y cuida del capital del mismo y también podrían haber observado el faltante en crecimiento.
En definitiva, la investigación la tiene el comisario Pico de Catriló, que ya ha notificado de todo a la fiscalía capitalina y se esperaban hacer en las próximas horas distintos allanamientos que ayuden a esclarecer este ilícito que, como indicábamos al principio, es impactante por la cantidad robada y el valor de la hacienda, porque estamos haciendo referencia a novillos medianos y grandes como también de vacas que estaban por tener cría y otras servidas para hacerlo en el año entrante.