La Confederación de Asociaciones Rurales de Buenos Aires y La Pampa (Carbap) salió a cuestionar a un grupo de intendentes bonaerenses por haber incrementado en el último tiempo “significativamente” la presión fiscal sobre el sector agropecuario, especialmente a través de la tasa vial y la de guía de traslado de hacienda.
La Confederación de Asociaciones Rurales de Buenos Aires y La Pampa (Carbap) salió a cuestionar a un grupo de intendentes bonaerenses por haber incrementado en el último tiempo “significativamente” la presión fiscal sobre el sector agropecuario, especialmente a través de la tasa vial y la de guía de traslado de hacienda.
“Estas tasas se han convertido en herramientas recaudatorias abusivas, con valores fijados de manera arbitraria y sin justificación técnica. Además, han surgido nuevas tasas municipales que no guardan relación con la prestación de servicios concretos, incrementando la carga impositiva sobre los productores rurales y de las actividades económicas en general”, indicó la entidad que integran 114 asociaciones rurales y representa en ambas provincias a más de 4.000 productores
En lo que respecta a la tasa vial, destinada a la conservación de los más de 120.000 kilómetros de caminos rurales de tierra en el territorio bonaerense, desde Carbap se quejaron que los municipios fijan valores de manera arbitraria, “sin justificación técnica ni planificación”. Y en ese sentido, denunciaron que hay diferencias hasta ocho veces entre distintas jurisdicciones, pese a que más del 60% de los caminos tienen un estado de regular a malo.
Si se analiza el aumento real de la tasa vial en términos de kilogramos de productos agrícolas (trigo y soja), se observa un alza promedio superior al 40% en la mayor parte de la provincia. Entre los distritos con mayor presión, resaltan Chivilcoy, Colón, Necochea, Mercedes, General Pueyrredón, Salto, Rojas, Carlos Tejedor, Junín, Trenque Lauquen e Hipólito Yrigoyen. “En algunos distritos, la tasa vial representa más del 4% del valor de un arrendamiento, lo que agrava aún más la carga fiscal sobre el sector agropecuario”, señaló la entidad.
La otra tasa que está en la mira de los productores por las fuertes desigualdades es la
de “Marcas y Señales”, relacionada con el traslado de hacienda. Mientras que algunos
municipios no la cobran, otros imponen costos superiores a $6.000 por animal enviado a faena, lo que representa hasta el 1,2% del valor de una vaca de descarte.
A la cabeza del ranking de las localidades que más cobran está Florentino Ameghino, seguido por Tres Lomas, Pehuajó, Rauch y Rivadavia. Luego le siguen con valores que van entre los $4.500 y $3400 los municipios de Carlos Tejedor, Hipólito Yrigoyen, General Lavalle, Tapalqué y Pila.
La otra queja del campo es que en los últimos años se crearon una serie de tasas “que no guardan relación alguna con la prestación de un servicio concreto”. En al menos 33 municipios de la provincia de Buenos Aires (sin contar los del conurbano bonaerense), se sumaron nuevas tasas a las boletas de la Tasa por Conservación y Mantenimiento de la Red Vial, lo que incrementa la carga impositiva sobre los productores. El concepto más común entre estas tasas adicionales es el de “seguridad rural”.
También el reclamo apunta a las tasas incluidas en los servicios públicos, algo que el Gobierno nacional intentó limitar, y que en algunos casos llegan a ser más del 10% de la boleta. A eso, se suma el resto de los impuestos provinciales y nacionales, siendo más del 35% del costo de la energía solo en impuestos. También impacta en esto el IVA en la energía eléctrica que sería algo que Nación debería corregir y que ya sumó reclamos de intendentes, como Arturo Rojas, de Necochea para aquellos funcionarios que desvíen fondos o incumplan con su obligación”, cerró Carbap.